Descubre la eficiencia de los electrodomésticos gracias a la etiqueta energética
Hace años que se está intentando concienciar a la población sobre la necesidad de buscar la eficiencia energética debido a la contaminación, el calentamiento global e, incluso, las crisis económicas. En consecuencia a la demanda por parte de los consumidores por ahorrar luz en sus electrodomésticos, las comunidades europeas han tomado medidas como la implantación de la etiqueta energética.
La etiqueta energética es un documento que viene adherido a los envases de los electrodomésticos. Nos informa del consumo de energía y agua del aparato. Es decir, nos facilita una información muy valiosa sobre la eficiencia energética de cada electrodoméstico, lo que te permite elegir el más adecuado a tus necesidades.
Esta etiqueta es obligatoria en electrodomésticos como lavavajillas, lavadoras, secadores, frigoríficos, etc. Pero es importante saber que no todos los aparatos eléctricos llevan este distintivo. Las etiquetas son obligatorias en los aparatos que generan mayor consumo eléctrico y/o de agua.
Las etiquetas constan de un código de color y una letra, que va desde los aparatos menos eficientes calificados con una G en color rojo, hasta los electrodomésticos más eficientes que se identifican con la letra A y el color verde. También pueden verse como A, A+, A++ y A+++ siendo está ultima la más eficiente. Además, se encuentra información específica en las etiquetas dependiendo el electrodoméstico que la lleve.
Por ejemplo, el frigorífico sería el electrodoméstico que más energía consume ya que permanece 24 horas, los 365 días del año, enchufado a la corriente. Puede llegar a consumir hasta un 30,6% de la energía total de un hogar. El frigorífico más ahorrador es el de clase A+++ que tiene un consumo inferior al 24% de energía. Para conseguir la excelencia en la compra lo mejor sería optar por aparatos ‘no frost’, que son aquellos que evitan la formación de escarcha tanto en el frigorífico como en el congelador, ya que está demostrado que una capa de escarcha de tan solo tres milímetros tiene el suficiente poder aislante como para aumentar el consumo de energía hasta un 30%.
Varias empresas y asociaciones de medio ambiente están intensificando las campañas de concienciación social, que son esenciales para educar a niños, jóvenes y personas mayores a mejorar la logística económica de sus hogares y promover, al mismo tiempo, la producción de electrodomésticos con calificación A.