Viajar solo activa tus neuronas
Gracias a los avances técnicos y sanitarios la vida humana es cada vez más larga. Vivimos más y mejor. Es por eso por lo que la madurez activa se ha convertido en el eje central de muchas asociaciones, revistas y programas institucionales. Esta filosofía se centra en actividades que mejoren la calidad de vida tanto en cuestión de ocio como de salud (ambas están relacionadas).
Una de las apuestas de estos programas para maduros activos son los viajes. El hecho de viajar implica activarte tanto física como psicológicamente, ya que el viaje conlleva la preparación de equipaje, el alojamiento, la documentación del lugar que vas a visitar, etcétera. De esta manera, ocupamos el tiempo en estas tareas y fomentamos la agilidad mental.
No hemos de olvidar que, entre los beneficios de viajar, destacan la disminución del estrés y prevención de la depresión, debido a la felicidad y al entusiasmo que generan tanto preparar el viaje como el hecho de vivir nuevas experiencias. Además, según estudios científicos, se ha comprobado que los hombres que viajan regularmente son un 21 % menos propensos a sufrir ataques de corazón.
¿Viajar solo o acompañado?
Aunque muchos aún no se atreven, también son muchos otros los que ya han hecho de viajar solos la mejor opción. Está claro que los beneficios de viajar acompañado consisten en que puedes compartir tanto buenos momentos como malos con las personas que te acompañan. Sin embargo, viajar solo te permite elegir el ritmo de viaje y conocer otras personas. Hay viajes que, como maduros activos, serán perfectos para disfrutar solos:
– Retiros espirituales: eliminarán todo el estrés y recargarán pilas.
– Crucero: la mejor manera de conocer varios destinos en poco tiempo.
– Cabañas rurales: aúnan naturaleza y actividad física.
Ahora solo te queda decidir qué viaje realizar y disfrutar de la madurez de manera activa.